La exposición “Korda, pasión e imagen” revela un panorama completo de su obra en existencia, afirma Virginia Fabri, curadora de la exhibición que trae a Córdoba 110 imágenes del fotógrafo cubano. En 220 Cultura Contemporánea (Costanera y Mendoza, subsuelo de Plaza de la Música) se puede visitar esta voluminosa exposición retrospectiva (organizada por fundación Melián) del autor de la foto más difundida de Ernesto “Che” Guevara: Alberto Díaz Gutiérrez, conocido como Korda (1928-2001). El plus, más allá de las postales de la Revolución Cubana, será que esta muestra llega con otros legados.
Distintas facetas de su producción, sostiene Fabri, compartirán el espacio de exhibición: la moda, la Revolución y el mundo subacuático: “Se podrán ver en la exposición series de imágenes inéditas en el contexto de su obra, como aquella de los ritos afrocubanos, producida por Korda para una revista”, adelanta. Se verán también otras imágenes icónicas: “No sólo Guerrillero heroico, la imagen del Che Guevara más reproducida de la historia de la fotografía, sino también La niña de la muñeca de palo, una hermosa niña de un contexto humilde retratada por Korda mientras jugaba con un palito de madera”.
Korda la llamaba “mi niña”, cuenta Fabri: “Esta niña provocaría un sentimiento especial en Korda, llevándolo a meditar fuertemente sobre las desigualdades sociales, lo que luego lo empujaría a dedicarse a retratar la naciente revolución”. Y destaca que “sorprenden las descontracturadas imágenes de los líderes de la revolución: Fidel y el Che pescando, haciendo buceo, esquiando o jugando al golf, entre otras imágenes de la revolución”.
La selección de la obra que se exhibirá se hizo entre Fabri, Diana Díaz López (hija de Korda) y su marido Reinaldo Almira Naranjo, ambos custodios del legado.
“Si tengo que buscar un nexo –sostiene Fabri relacionando sus distintas facetas–, vale la pena contar la anécdota del encuentro de Korda con el fotógrafo norteamericano Richard Avedon, quien al ver sus fotografías de moda le sugirió que se dedicara a retratar a la mujer en el contexto de la revolución”.
Fabri recuerda que la carrera de Korda comenzó como fotógrafo de moda y publicidad en 1954: fue el iniciador de la fotografía de moda en Cuba. “A raíz de su posterior trabajo en un periódico, comenzó su acercamiento con Fidel Castro y a partir de allí comenzó a retratar la naciente Revolución Cubana, lo cual hizo entre los años 1959 a 1968”, detalla.
Las partes encajan: “Su sueño era que la revolución contribuyera a eliminar las desigualdades sociales en Cuba, considerando que la belleza de la revolución era aún más bella que la belleza de la mujer”, sostiene. “Recién a fines de 1969 y durante 10 años, se dedicó a retratar el mundo submarino, creando el Departamento de Fotografía Subacuática”, comenta Fabri. A partir de allí se dedicó a viajar por el mundo dando conferencias y realizando exposiciones.
La muestra se completa con el espacio “Vacaciones con el Che”, en el que se podrán ver 14 ilustraciones del libro Che, la estrella de un revolucionario, de Guido Indij, una animación del cuento, tablero y figurín interactivos; e incluirá una serie de talleres de fotografía, stop motion, murales, radio, clown, teatro y títeres.
“Korda nos revela una época especial de Cuba, con su belleza, sus desigualdades, y sus personalidades heroicas que hicieron historia a partir de la revolución”, reflexiona la curadora sobre la presentación de esta muestra “en un momento en que Cuba está mostrando ciertos rasgos de apertura, en particular hacia Estados Unidos”.
“Korda nos lega sin duda un fabuloso archivo histórico y social, sea éste desde el lugar desde donde se lo mire: como parte de la historia de Cuba y la revolución, a la vez que con el nacimiento de personalidades complejas, heroicas y románticas o bien, mostrando la propia belleza de la isla”.
Detrás de la fama
Sobre el famoso retrato del Che, Guerrillero heroico, Fabri revela que su protagonismo fue muy posterior al momento de la toma: “El retrato fue tomado en 1960, en una conmemoración realizada por las víctimas de la Couvre en Pan American Docks. Se trataba de las víctimas de un atentado a un navío que traía desde Bélgica municiones para la naciente revolución”, señala. Y añade: “Dos años antes del asesinato del Che, el editor italiano Feltrinelli adquirió dos copias de la imagen durante su estadía en Cuba. Rápido de reflejos, al morir el Che, convirtió el retrato en pósters, y a partir de entonces Guerrillero heroico se transformó en una de las imágenes más famosas y reproducidas de la historia de la fotografía cubana”.
La imagen es impactante, reconoce: “Una mirada distante, como observando por encima de las circunstancias hacia un futuro de una revolución que lo transformaría sin dudas en un guerrillero heroico”.
Korda, pasión e imagen. La exposición compuesta por 110 imágenes de su legado artístico se podrá visitar hasta el 7 de agosto en 220 Cultura Contemporánea (Costanera y Mendoza, subsuelo de Plaza de la Música), de martes a domingos de 16 a 21. Entrada general: martes a jueves: $ 35. Viernes a domingo: $ 40. Martes: 20% de descuento a estudiantes y jubilados. Jueves 2×1 con Club La Voz.
Opinión: Mucho más que la famosa foto del Che
Por Diana Díaz (Hija de Korda, a cargo de su legado)
Cuando nací mi padre tenía 23 años; no era aún fotógrafo, aunque sí le gustaba tirar fotos a mi madre y a mí. De esa época guardo algunas muy tiernas. Cuando dejó todo para dedicarse a la fotografía practicaba con nosotros, y desde entonces, de muchos de los trabajos de publicidad que hacía y que salían en revistas y periódicos me traía una copia, para que yo la guardara. ¿Casualidad o premonición?
A veces me surge la idea de que de algún modo estaba predestinada para continuar su legado. Mi mayor compromiso en estos momentos es seguir investigando, rescatando y recopilando la mayor información posible con el fin de dar a conocer y promover en los principales centros expositivos toda la obra disponible y preservada de mi padre como legado de alto valor artístico e histórico.
Me resisto a que sea conocido y recordado por una sola imagen, la del Che, sabiendo que hay otras tantas buenas y que es mucho más que el autor de esa famosa foto.
Es cierto que la vastedad de su obra es reconocida internacionalmente, principalmente por el modo excepcional con que registró, junto a otros fotógrafos cubanos y extranjeros, los primeros años de ese evento de resonancia mundial que sin dudas fue la Revolución Cubana. Creo que gracias al trabajo que hemos venido realizando hoy se conoce en el mundo cuán versátil fue su labor (de su generación es considerado el más versátil de los fotógrafos cubanos) pues no sólo hizo fotoperiodismo sino también publicidad, moda (su gran pasión) y fotografía submarina. Pienso, sin falsa modestia, que a todas las ejerció con gran maestría, lo que lo convierte en una figura cardinal en la historia del arte cubano.
En cuanto a la mayor enseñanza que nos ha dejado Korda, considero muy importante su libertad de acción y pensamiento pero también la humildad, sencillez y sinceridad con que enfrentó la vida de manera personal y profesional.
En 220 Cultura Contemporánea se exhibe la muestra “Korda, pasión e imagen”, con más de un centenar de imágenes del autor del retrato más famoso del Che Guevara, pionero en la fotografía de moda y del mundo submarino en Cuba.