El paisaje, la imagen y la mirada son temas que la cordobesa Julia Romano indaga en su trabajo artístico, que enlaza pintura y fotografía y ha producido series como Paisajes prestadosy Estudios sobre el Paisaje, fotos y collages digitales trabajados en distintas capas en los que el plano de un paisaje de fondo (“prestado”) de pinturas clásicas se ve intervenido por detalles vegetales, frutales o florales, traídos de otras imágenes paisajísticas.
También ha creado obras con la idea de invadir los espacios con naturaleza artificial, como una serie de vinilos colocados en las ventanas del Museo Genaro Pérez, o trabajos como Jardín colgante, una instalación realizada con flores de tela que se enredan en rejas de metal, cubriendo el espacio de fucsia y rosa.
Ahora Julia Romano llega al Centro Cultural El Parque de Salsipuedes con La representación del paisaje como imagen del mundo, que abrirá al público este sábado 13 de junio a las 19.
La artista fue invitada a trabajar en este espacio en diciembre del año pasado. Luego de una primera visita, el 15 de febrero sucedieron las trágicas inundaciones que arrasaron las Sierras Chicas, y el entorno que Julia había vislumbrado como imagen paradisíaca de su obra se desplomó.
En el texto que sigue, Julia cuenta sus sensaciones, habla del concepto que sostiene su accionar artístico y rescata la idea de que un rercuerdo (o un registro de algo que fue) puede ocupar el lugar de la realidad.
Aquí mi parque de Salsi. Mi versión de los hechos
Les cuento lo que pasó con esta muestra.
Fui invitada en diciembre de 2014 para hacer algo en abril, mayo de 2015. En diciembre fui a visitar el lugar, lo recorrí con Paula Oyarzábal, saqué fotos y estuvimos hablando de lo hermoso del paisaje y cuánto le aportaba al espacio de exhibición propiamente dicho, que es muy sencillo.
Quedamos en que iba a armar algo en relación a este contexto privilegiado de la sala.
En febrero vinieron las lluvias y las inundaciones y ese paisaje simplemente ya no existe más.
A raíz de esto, mi muestra quiere hablar, entre otras cosas, de que el paisaje no es el territorio, el paisaje es el que armamos una y otra vez cuando lo recorremos, cuando lo recordamos o cuando lo soñamos. Nunca es el mismo, cambia por las fuerzas de la naturaleza (que son muy potentes!) como por las fuerzas del pensamiento, de la ilusión y el deseo.
En mi muestra voy a exhibir un registro de lo que vi y sentí en diciembre. Un derredor que me abrazaba y contenía con su luz filtrada por los árboles, su silencio, había entrado a otra dimensión, a un jardín mágico, perfecto. Y lo reconfortante del recuerdo –y de ciertos registros fotográficos- es que pasan a ocupar el lugar de la realidad. Ahora, dentro de la sala el parque vuelve a ser ese recuerdo luminoso y feliz. Para mí no existe otro lugar que aquel de la construcción personal cargada de cientos de subjetividades y especulaciones y reflexiones e intuiciones.
Por eso Estudios sobre el paisaje es una serie que se ha olvidado de la fotografía como registro de la realidad y quiere ser una oportunidad de construir el propio escenario. Quiere ser la posibilidad de lanzar al aire los elementos para luego organizarlos a la medida de cada uno. Exactamente como lo hicieron los precursores europeos con las primeras pinturas de paisajes allá por el 1600. Ninguno de esos paisajes representados en los lienzos existe. Son versiones. Aquí mi parque de Salsi. Mi versión de los hechos.
Julia Romano interviene el Centro Cultural El Parque de Salsipuedes con una obra que continúa sus indagaciones sobre el paisaje y la fotografía. Un texto de la artista cuenta sus decisiones después de que el lugar sufriera la inundación de febrero. Mirá las fotos del montaje.