"No suelo ponerle títulos a las obras porque me interesa también la idea de que cada uno pueda descubrir o ver lo que genera la pieza", cuenta Sara Fernández sobre La belleza da asco, obra con un título que no podía pasar inadvertido. Su escultura (cerámica) obtuvo el primero premio adquisición, de 30 mil pesos, en la quinta edición del Salón Patio Olmos, un concurso de escultura provincial para jóvenes artistas que este año se organizó junto al Museo Caraffa (Poeta Lugones 411), donde se exhibe la muestra con las obras galardonadas junto a las de los artistas seleccionados.
En este certamen, Pablo Peisino ganó el segundo premio adquisición, de 25 mil pesos, por su obra Pesadilla 895. Y Santiago Lena, con una pieza sin título, se llevó el tercer premio adquisición, de 20 mil pesos. Los dos primeros trabajos pasarán a formar parte de la colección del Caraffa y el tercero irá a la colección del Olmos. Inés Tilous (Sin Título); Samantha Ferro (Hogar N° 2); y Laura Sánchez (Fábula N° 154), en tanto, recibieron en ese orden, primera, segunda y tercera mención del jurado.
La belleza de los otros
Sara Fernández relata cómo trabajó su escultura: "Particularmente con esta pieza pasé mucho tiempo en su elaboración, fue un proceso largo de creación y de reflexión. Hay muchas cosas que se me vienen a la cabeza, tantas que prefiero plasmarlas en una sola pieza". Dice que una vez alguien le preguntó que era el arte para ella y respondió: "Es la materialización de mis pensamientos que pasarán a ser parte de los tuyos".
Marina De Caro, artista porteña, integrante del jurado de premiación junto con los artistas cordobeses Tulio Romano y Luli Chalub, destacó que decidió apostar por la obra de Fernández por su apelación a lo latinoamericano y por ser una obra de fuerte esteticismo, a pesar de su título.
"La obra irradia mucha belleza pero mis pensamientos son apocalípticos y nauseabundos, veo a todos (incluyéndome) sumergidos en el consumo", es lo que tiene para decir Sara sobre La belleza da asco. Y completa: "Las cosas no están bien, mucho menos para un artista. Si las condiciones en este país no están dadas para que podamos sobrevivir de la creación (aunque sea el deseo de todos) no es una realidad posible".
Sobre el premio, más allá de lo que significan sus principales valores (dinero y reconocimiento), para la artista es importante poder mostrar lo que tanto le apasiona. "La función del objeto artístico se cumple cuando llega a la mirada del otro, cuando toma otro significado que ya no es el propio y esto sucede con las obras más conceptuales hasta las más rústica", agrega.
Dios y diablo
En su obra, Sara Fernández hace referencia a su lugar de origen, la ciudad de Santa María, en Catamarca. Consciente de la "fuerte influencia de esa cultura y la cultura católica que está impuesta hasta el día de hoy", sostiene que su escultura podría ser un dios/diablo. "Aquí se refleja de nuevo la dualidad de la que nunca pude desprenderme porque somos seres contradictorios, hacemos y deshacemos", agrega.
Otra anécdota la hace seguir pensando en la belleza en el arte: "Una vez una señora que fue a casa me dijo '¡Qué lindos los adornos! ¿Quién los hace?'. Me quedé pensando. Primero, qué bueno tener adornos tan feos. Y segundo, la gente que no va a los museos ni es parte del circuito (cerrado), ve a las obras de arte como adornos, donde el único fin es la belleza estética".
Observa que en la era de la imagen en la que vivimos, "todo gira en torno a la belleza". Pero ¿cuáles son los parámetros? "Lo que es bello para vos, a mí me da asco y viceversa", concluye la artista.
La muestra
Quinto Salón de Escultura Patio Olmos. Museo Caraffa (Poeta Lugones 411). La muestra exhibe las obras de Ángel Pacheco, Cristian Tula, Dianela Paloque, Diego Sentana, Gisella Scotta, Ignacio Heuyo, Inés Miserendino, Inés Tillous, Jacinto Muñóz, Julia Spangenberg, Laura Sánchez, Lucía Contato, Luciana Martínez, Luciano Burba, Matías Barrios, Natalia Estarellas, Nicolás Machado, Noel Toledo Gonzo, Pablo Peisino, Paula Páez, Salvador Marino, Samantha Ferro, Santiago Lena y Sara Fernández. Martes a domingos de 10 a 20.
La artista Sara Fernández reflexiona sobre su obra La belleza da asco, ganadora del primer premio del Salón Patio Olmos que se exhibe en el Museo Caraffa.