Quantcast
Channel: VOScomar | Artes
Viewing all articles
Browse latest Browse all 1280

Punto de Vista: Entre el Mercado y el Limbo

$
0
0

El Salón de los Rechazados quedó en la historia como el ejemplo más notable de una situación que comenzó con un conflicto y terminó potenciando la escena artística. En 1863, la mirada académica de los jurados del Salón de París había dejado afuera de la muestra oficial a un número inusualmente elevado de obras (alrededor de tres mil), entre ellas el Desayuno sobre la hierba de Édouard Manet. Frente a los crecientes reclamos, Napoleón III decidió auspiciar una exposición que cobijara a los excluidos en un anexo, de modo que el público juzgara. Así nació el Salon des Refusés, amparado primero por el Estado francés y retomado en las décadas siguientes por los propios artistas en muestras que se convertirían en un ámbito de progresiva legitimación de la vanguardia. 

Un breve repaso de una extensa secuela de rechazados debería incluir al grupo alemán Die Brücke, que en 1906 mostró sus pinturas expresionistas en una fábrica de lámparas. Y a los revoltosos organizadores de la primera muestra de la Sociedad de Artistas Independientes de Nueva York, realizada en 1917, que pese a sus amplios criterios tuvo su propio caso de exclusión al impedir la exhibición de un famoso urinario titulado Fuente, la obra de Marcel Duchamp que cambiaría la historia del arte.

Hoy se puede leer como una herramienta de la autogestión a muchas iniciativas que surgen de cortocircuitos o desacuerdos con las instancias oficiales o los mega emprendimientos en el campo del arte, la música, el teatro y el cine. En la actualidad adquiere otras formas, y es obvio que hay que salvar las distancias. Pero las dinámicas autogestivas se enganchan sin duda a una larga tradición.

En esa línea están la Feria de Ediciones Independientes de Córdoba que organiza el colectivo Libros Son, el Anti-Kiosquín Rock (festival promovido por bandas del under), el Contra-Festival regional de teatro independiente o incluso la reciente feria de galerías Faca, que en su primera edición se plantó a pocas cuadras de la dominante arteBa con la idea de disputar la escena.

La escuela del “contra evento”, la muestra o el festival paralelo sumó otro episodio en Córdoba. Un grupo de gestores a cargo de espacios artísticos expresó su malestar en relación a la escasa participación de proyectos locales en la quinta edición de Mercado de Arte Contemporáneo, la feria que culminó el domingo en el Cabildo. 

El reclamo se disparó a fines de junio, cuando se conoció la nómina de galerías seleccionadas para Zona Bonino, el segmento de la feria de arte que incluye las propuestas emergentes o en vías de afianzarse en el circuito comercial. Sólo cuatro proyectos cordobeses fueron incluidos en ese sector donde los stands son otorgados sin costo.

Tras una reunión con el área de Cultura de la Municipalidad, que organiza la feria, los artistas trazaron una agenda de trabajo conjunto para asegurar mayor presencia local y otros puntos como apuntalar a los espacios para que hagan una transición a la Zona Crespo (el segmento “principal” de la feria) y generar un proyecto de ordenanza que garantice la continuidad de Mercado de Arte Contemporáneo. Sin embargo, durante ese encuentro rechazaron sumarse a la presente edición de la feria. Luego emitieron un comunicado que ratificaba la decisión de no participar “a pesar de la invitación por parte de la organización de presentar propuestas alternativas”, y dejaron picando que empezaban a cranear su propio evento.

Dicho y hecho. En simultáneo con Mercado de Arte, a muy pocas cuadras del escenario de la feria y durante los mismos días se realizó desde el jueves hasta el domingo la primera edición de Limbo club de arte. Con sede en el art hotel Sacha Mistol (Rivera Indarte 237), la propuesta reunió a 12 proyectos autogestionados y potenciados en la tarea de construir nuevas plataformas de acercamiento a las artes visuales, como podía leerse en una especie de mini manifiesto divulgado junto a la programación del evento, que incluyó muestras, intervenciones, performances y talleres. 

En Limbo participaron Bitácora de Vuelo, Pinball, CienDías, Sacha Mistol, Payaso de Vitruvio, Mommia, Criatura Extraña, Casa de Cosos, ungloborojo, Obra Co-Working, Mini Contemporáneo e Híbrido de arte.

La idea de Limbo es un hallazgo lingüístico, un poco auto irónico, que alude a la situación de no encontrar "zona", de estar flotando en algún lugar entre el paraíso y el infierno. Pero no hay nada asociado a la inmovilidad en el nombre que eligieron. Ya están pensando en Limbo 2018.

Para el público es una buena noticia la multiplicación de eventos y la ampliación de la oferta cultural que significa el surgimiento de acciones como Limbo arte club. La legítima demanda de mejoras en las políticas estatales referidas al campo artístico se combinó en este caso con una práctica que dignifica a la autogestión y la fortalece con tácticas que consisten en organizarse, generar circuitos y agitar las propias ideas sin quedarse encerrados en la protesta. Ya lo decía Manet hace un siglo y medio: “Exponer es encontrar amigos y aliados para el combate”.

Título Home: 
Punto de Vista: Entre el Mercado y el Limbo
Imagen: 
Limbo club de arte incluyó un taller de dibujo y texto poético a cargo de Pablo González Padilla, Athos Pastore y Diego Iparraguirre. / Foto: Facebook de Juan Juares.
Tag Duro: 
Enviar a Newsletter: 
Elementos Relacionados: 
Relacionados Multimedia
Destacado en Player Home: 
Edición Impresa: 
Habilitar Yo Informo: 
Bajada: 

En paralelo a la feria de arte que organizó la Municipalidad de Córdoba se desarrolló hasta el domingo una propuesta de proyectos autogestionados. Existe una larga tradición de “contra-eventos” que sirven también para enriquecer la escena.

Con Solapa Multimedial: 
Player Ancho Full: 
Fecha y Hora: 
Monday, 21 August, 2017 - 15:15
Elegido del editor: 
Versión reducida: 
Nota Atemporal (evergreen): 
uidautor: 
27751
Calidad: 
Reenfocada: 
Nota premium: 

Viewing all articles
Browse latest Browse all 1280

Trending Articles