“Sal de acá”, señala un cartel que se deja leer al menos en dos sentidos. Si se toma a “Sal” como sustantivo, el significado se abre para el lado de lo que muestra la imagen, una enorme extensión salina, como un océano. Si se lee como verbo, “Sal” funciona en su modo imperativo, trabaja como una orden de abandonar el lugar.
Ambos significados están trabados y generan una región de sentido ambigua, que admite una lectura “política” de la obra del artista boliviano Alfredo Román. Se trata de una fotografía intervenida (el paisaje que se ve es el fabuloso salar de Uyuni, una especie de postal del país) que exhibe La Florida, la galería de arte proveniente de Santa Cruz de la Sierra que arribó con su propuesta a Mercado de Arte Contemporáneo. El espacio viene en representación de Bolivia, el país invitado en la quinta edición de la feria que abrió el jueves al público.
El stand se ubica en la última sala de Frontera Abierta, el sector que incluye además a Monocromo de Paraguay, Barrios Bajos de Chile y Lastro+Plana de Brasil.
La Florida viajó con otra obra de Román, un conjunto de billetes de un dólar sellados con una leyenda que dice “Volveré y seré millones”. La frase, que en la Argentina remite directamente a Eva Perón, tiene otra resonancia en Bolivia. Se la atribuyen a Túpac Katari, líder de un levantamiento indígena que tuvo lugar en 1781, poniendo en jaque a las autoridades coloniales españolas en las zonas de población aymara. Murió descuartizado, luego de que le cortaran la lengua.
Otras piezas que apelan al dinero son unas monedas de chocolate, enmarcadas en unos pequeños cofres transparentes. Tienen el valor de cinco soles y en una de sus caras aparece la silueta de Evo Morales.
La “bolivianidad” es un eje fuerte en la propuesta de la galería, que en algunos casos apela a una estética “chola”, como la define la directora del espacio María Schneider.
También hay obras en exhibición de José Ballivián, un artista en auge que representó a Bolivia en la última Bienal de Venecia, autor de Chola Nike, un sombrero típico de las mujeres bolivianas que lleva bordado el logo de la marca deportiva. Su presencia en el stand de La Florida consiste en un video y un conjunto de dibujos realizados en grafito con detalles en pan de oro y pan de plata. En los dibujos retrata a personajes de la calle, vendedores de diarios o lustra botas ataviados con pasamontañas. También aparecen figuras tradicionales del folklore boliviano como una China Supay, una máscara típica del carnaval de Oruro que es la pareja del Diablo.
La propuesta se completa con un set de videos de Sergio Bastani, Iván Cáceres y Galo Coca, fotografías tomadas con celular de Oscar Barbery y una serie de caleidoscopios de Glenda Zapata hechos con hueso, y en cuyo interior se encuentran pelos, uñas y sangre.
“Seguramente todos estamos al tanto de quién gano el León de Oro en Venecia –señala Schneider–, pero poco sabemos o conocemos de lo que se está produciendo en el país de al lado”. La visita de La Florida funciona como una ventana al arte contemporáneo boliviano, y propone comenzar a saldar esa deuda.
Actividades. María Schneider, gestora cultural y curadora, participará este viernes a las 17 en el Cabildo en una mesa sobre "La escritura y la crítica", junto a Leticia Obeid, Federico Baeza y Nancy Rojas. El domingo a las 18, en el Cabildo, el artista José Ballivián participará en "Foco Andes", un espacio destinado a pensar el arte actual entre países limítrofes cordilleranos. Junto a Federico Fischbarg (Dirección Nacional de Museos, Ministerio de Cultura de la Nación) y Roxana Ramos (curadora, Salta).
La galería La Florida llegó desde Santa Cruz de la Sierra con una propuesta que incluye dibujos, fotografías, objetos y videos. Se presenta en el segmento Frontera Abierta de la feria Mercado de Arte Contemporáneo.