Quantcast
Channel: VOScomar | Artes
Viewing all articles
Browse latest Browse all 1280

Una megapintura en el Museo Caraffa: en las entrañas de la pintura

$
0
0

"La pintura es mi polaroid de cómo estoy y quién soy", dice Irina Rosenfeldt. Tamaña declaración no la distrae a la hora de describir con precisión matemática La Noche de Minerva, la obra que exhibe en el Museo Caraffa (Poeta Lugones 411), una instalación pictórica sostenida por una estructura circular que se asemeja a los antiguos "panoramas": mide 28 metros de largo, ocho metros de diámetro y tiene dos metros de altura.

En la sala, la enorme forma se ve en penumbras. De afuera no se adivina lo que hay en su interior. Para Irina, este gran paisaje psíquico de colores vibrantes, arrastra materia, gestos virulentos y abundantes, fuerzas centrífugas y centrípetas y construcciones espaciales que se entretejen para ofrecer "una experiencia kinestésica a quienes se enfrentan con este friso envolvente".

Un tramo en la psicodélica obra de Rosenfeldt. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.

La sensación de inmersión que propone su obra hace perder la ilusión de la pintura como una ventana hacia afuera, enfatiza. Hay aquí "un encuentro cuerpo a cuerpo con la pintura como cosa mental, pero también como entidad física que se planta ante nosotros con toda intensidad", sostiene la artista, que el próximo 28 de julio a las 19 vendrá para guiar un recorrido.

La Noche de Minerva es como meterse literalmente en las entrañas de la pintura. Ella no lo había pensado así ("la palabra entraña es muy potente", dice), pero acepta la idea, porque "las entrañas son un sensor importante de la percepción". A veces imagina a su obra como un "abrazo uterino bien maternal, algo que también puede volverse un poco coercitivo, dependiendo de la subjetividad de cada uno".

Su trabajo va de lo micro a lo macro, y entre ambas escalas genera espacios en la pintura. Irina relata cómo logra este efecto: "Armo este entramado mostrando estructuras enormes conformadas por un ensamble de micro formas; planteo falsas perspectivas, un no-horizonte que genera esa espacialidad, como en el microscopio, un flujo de formas en una dinámica con lógica propia". La idea, agrega, es dejarse afectar por la energía de la pintura, la potencia del color. Quería potenciar la cualidad excesiva de las pinturas, que además de ser grandes, muchas de éstas vienen de formas existentes, explica. Lo "saturado del color, tanta morfología orgánica y tanto exceso", alimentan esta potencia.

Circularidad, loop y psicodelia

Irina cuenta que en La Noche de Minerva primó lo circular, un planteo más existencial a partir de una secuencia cíclica y no lineal. La circularidad es como un loop en su obra, plagada de formas que abren y cierran, que se trasladan, viajan, flotan, atrapan, seducen.

Como en su arte, también la vida es para ella un loop. "Cometemos los mismos errores que nos mantienen en el mismo lugar, aunque con distintas anécdotas", reflexiona. Aunque "no se está nunca en el mismo lugar". En términos de pintura, estima que el loop se dio cuando lo orgánico pidió ser continuado con una estructura coherente a su cadencia.

Ingreso a 'La Noche de Minerva', instalación pictórica de Irina Rosenfeldt. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.

Rosenfeldt piensa que tal vez la obra trata del proceso de aprendizaje: "De hecho Minerva es la Diosa de la Sabiduría para la mitología griega, la diosa lleva en su hombro una lechuza que emprende su vuelo nocturno, y al día siguiente regresa y se posa en el otro hombro de Minerva manifestando que ya no es la misma". Para la artista, el aprendizaje permite el progreso y "ese proceso es constitutivo, vital".

Sensaciones

Presenciando su obra, observó que cuando el visitante llega desprevenido ve sólo una pared blanca y acota que si persiste en su curiosidad este espectador entra en un mundo "sorprendente, onírico, psicodélico". "En un análisis inmediato de impacto, he visto gente dar un paso atrás, que su pecho se contraiga y abrir su boca y luego avanzar boquiabierta hasta que se forme una sonrisa", señala.

Irina dice que recibió devoluciones bellísimas de docentes de plástica cordobeses en relación al estilo, a la potencia del color. Sabe que llegar hasta aquí es haber pintado muchísimas horas y encontrar algo verdadero.

Vista panorámica de 'La Noche de Minerva', la obra de Irina Rosenfeldt. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.

Quien tiene empatía con la obra se va lleno, dice en relación a la afinidad: "Los artistas somos un coro de diversidades. Mi trabajo está entre el sentir y el pensar, justo en el medio. Porque la obra no es nada gestual, es bien mental, pero es una obra de sensación".

Salir del lugar común

Irina trabaja en obras de gran porte, uno de los rasgos del arte contemporáneo. ¿Hay una experiencia intransferible allí? Para Irina, las obras que generan una disrupción física "re-colocan". Son experiencias que "te sacan del automático mental, eso incluye el cuerpo, el sentir, como un orgasmo, una comida, el amor". Y es lo que aporta el arte: traer al presente a las personas. "Cuanto más experiencias de presente tengas en tu vida, mejor", sostiene.

"Cuando salís de tu cabeza y sentís, después podes pensar", afirma. Para la artista, verdad y belleza, acorde a todas las subjetividades, son buenos aliados para generar experiencias. "La verdad siempre tiene belleza", concluye.

 

 

Título Home: 
Una megapintura en el Museo Caraffa: en las entrañas de la pintura
Imagen: 
El primer impacto que tiene el visitante en la sala 5 del Museo Caraffa, con 'La Noche de Minerva'. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.
Ingreso a 'La Noche de Minerva', instalación pictórica de Irina Rosenfeldt. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.
Un tramo en la psicodélica obra de Rosenfeldt. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.
Vista panorámica de 'La Noche de Minerva', la obra de Irina Rosenfeldt. Fotografía: gentileza de Gonzalo Viramonte.
Tag Duro: 
Enviar a Newsletter: 
Elementos Relacionados: 
Relacionados Multimedia
Destacado en Player Home: 
Edición Impresa: 
Habilitar Yo Informo: 
Personas: 
Bajada: 

Con "La Noche de Minerva", Irina Rosenfeldt involucra al espectador en un enorme volumen pictórico. "La idea es dejarse afectar por la energía de la pintura", propone la artista porteña. Hasta agosto, en el Museo Caraffa.

Con Solapa Multimedial: 
Player Ancho Full: 
Elegido del editor: 
Versión reducida: 
Nota Atemporal (evergreen): 
uidautor: 
0
Name Desktop: 
vmolas
Calidad: 
Reenfocada: 

Viewing all articles
Browse latest Browse all 1280

Trending Articles