Christo, el artista que envolvió al Reichstag en Berlín en propileno plateado, murió el domingo en Nueva York a la edad de 84 años, según informó su página web y confirmó a dpa su oficina.
Cualquiera que pensara que Christo veía un significado más profundo en su Reichstag de Berlín envuelto en plata o en sus amarillos muelles flotantes en un lago de Italia estaba equivocado. "Es totalmente irracional y sin sentido", dijo una vez el artista búlgaro-estadounidense del embalaje sobre sus obras.
Pero la belleza de sus edificios y paisajes transformados en objetos abstractos fascinó a millones. Con sus instalaciones monumentales, Christo le dio al mundo una nueva mirada.
Junto con su esposa Jeanne-Claude luchó contra la resistencia opuesta a sus proyectos durante años y luego inspiró a millones. El artista había estado trabajando en los últimos tiempos "sin descanso" en su estudio de Nueva York para cubrir el arco del triunfo parisino, como dijo a dpa en su última entrevista, a mediados de abril. Debería haber sido su "momento culminante del año", pero tuvo que ser pospuesto hasta 2021 debido a la pandemia de coronavirus. Christo ya había hecho los primeros bocetos para el proyecto parisino hace unos 60 años.
Siempre fue un juego de forma y color cuando el artista, nacido el 13 de junio de 1935 como Christo Vladimiroff Javacheff en Gabrovo, Bulgaria, cubría una vez más un pedazo del mundo con sus láminas de plástico.
Entre los más famosos de sus proyectos realizados en todo el planeta se encuentran las puertas de entrada de color azafrán del Central Park de Nueva York, las pasarelas flotantes cubiertas de tela de nylon sobre el agua del lago Iseo en Lombardía, así como el Reichstag de Berlín, que fue envuelto en 1995, y el Pont Neuf envuelto en París.
Las instalaciones, algunas de las cuales eran visibles desde muchos kilómetros de distancia, como la "Cortina del Valle" en Colorado o los parasoles gigantes amarillos y azules en Japón y California, fueron creadas como un equipo por Christo con Jeanne-Claude. Desde la década de 1990 hasta la muerte de ella actuaron siempre a dúo. Jeanne-Claude, que había nacido en Casablanca el mismo día que Christo, murió en 2009 en Nueva York a la edad de 74 años de una hemorragia cerebral.
"Jeanne-Claude y yo hacemos estas cosas por nosotros mismos", dijo el artista del pelo crespo blanco. "Si a alguien le gusta, es solo un bono. Hacemos cosas que nos gustan visualmente". El camino es el objetivo: "Estos proyectos nos llevan a lugares mucho más ricos que el mundo del arte o la galería o el museo. Podemos trabajar con muchas personas diferentes. Es una aventura y muy emocionante e insensata".
El matrimonio de ambos era también el del socialismo y el capitalismo: Christo, de formación marxista en Bulgaria, no aceptaba dinero de patrocinadores ni subsidios estatales. Solo pudo realizar su arte gratuito para millones de personas gracias al espíritu empresarial de su esposa.
En 2005, rechazaron la oferta de un financista de 50 millones de dólares para comprar las 7.500 puertas naranjas y las telas del Central Park. Se dice que Christo dijo en respuesta a la oferta: "No los vendería ni por 100 millones."
En Alemania se hizo inolvidable su obra sobre el Reichstag de Berlín, el histórico edificio del Parlamento, envuelto en tela de plata y atado con cuerdas azules. El espectáculo de dos semanas en junio de 1995 con el Reichstag empaquetado como regalo brillante simbolizó de alguna manera el nuevo comienzo de la Alemania reunificada, fue una fiesta de verano conmemorativa de la caída del Muro.
La pareja de artistas también había luchado durante décadas por el permiso para el proyecto del Reichstag. Finalmente lo recibió por votación oficial en el Bundestag, programada por la entonces presidenta del Parlamento, la política conservadora Rita Süssmuth.
"Nos invitó a Jeanne-Claude y a mí a su casa en Bonn para hablar con ella", recordó Christo en una entrevista con dpa. "Siempre digo que si Rita Süssmuth no hubiera sido elegida, el proyecto del Reichstag no se habría llevado a cabo."
El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, ha expresado su preocupación por la muerte de Christo. "Lloramos la pérdida de un gran artista", declaró hoy Steinmeier. "Con el Reichstag velado, Christo nos ha dado a los alemanes una obra de arte que siempre será inolvidable. Como símbolo de una Alemania abierta al mundo, está grabado en nuestros corazones", dijo el mandatario.
No fue el único proyecto de Christo en Alemania. El primero que llegó a concretar en su carrera fue una pila de toneles envuelta en el puerto fluvial de Colonia, en 1961.
En 1968 participó junto a Jeanne-Claude en la documenta de Kassel montando una espectacular estructura tubular de polietileno de 58 metros de altura. Con un paquete de 90 metros de altura bautizado como el "Gran Paquete Aéreo" sobre el gasómetro de Oberhausen, realizó en 2013 su primer obra en ausencia de Jeanne-Claude.
La independencia financiera dio a Christo mucha libertad en sus largos esfuerzos por realizar un proyecto, en parte contra la resistencia de los ecologistas y a pesar de las condiciones impuestas por las autoridades de la construcción.
En 2017, por ejemplo, en una protesta abierta contra el presidente de los Estados Unidos Donald Trump, abandonó la obra "Over The River" en el estado de Colorado, en la que había invertido unos 15 millones de dólares en veinte años. Habría tenido que alquilar la tierra del río Arkansas al gobierno estadounidense encabezado por Trump.
La transitoriedad de las instalaciones temporales a gran escala siempre fue un recordatorio de la fugacidad de la vida misma. "Es de alguna manera ingenuo y arrogante creer que esta cosa se quedará para siempre, para la eternidad", comentó Christo en el momento del recubrimiento del Reichstag.
Todavía había muchos proyectos que quería realizar, como "Mastaba", una escultura de 150 metros de altura hecha con más de 400.000 barriles de petróleo en los Emiratos Árabes Unidos, en la que el artista había estado trabajando desde 1977.
Superficies plásticas brillantes, edificios y paisajes, como si estuvieran envueltos en regalos o paquetes de gran tamaño, son imágenes fascinantes de la obra de Christo que permanecerán en la memoria. El hecho de que casi ninguno de ellos pueda ser visto hoy en día solo aumenta su magnificencia.
"Todos estos proyectos tienen una fuerte dimensión de ausencia, de contención", dijo Christo sobre la envoltura del Reichstag. "Desaparecerán, como nuestra infancia, como nuestra vida." Eso es lo que hace que la experiencia sea tan intensa.
